El viernes 26 de mayo nos reunimos en el Kenchō para armar los paneles acerca del país de cada kenpi.
La semana previa estuve hablando por chat con Sayuri, la otra kenpi de Argentina, para definir como íbamos a armar el panel, así que estuvimos reuniendo información y fotos para poner. Y unos días antes del viernes, enviamos a Kinjo-san lo que necesitábamos impreso.
El día empezó a las 13hs con una charla sobre los proximos eventos de la beca, luego consultas sobre correo que recibimos y los alquileres. A las 14:30 aprox empezamos con los paneles. Estos posters serán exhibidos más adelante en el Kenchō.
Cómo los afiches que nos dieron eran un poco más chicos que 1m x 1m que nos habían dicho antes, tuvimos que re adaptar lo que habíamos pensado. Por suerte ya teníamos todo listo y solo fue cuestión de cortar y pegar.
El tiempo límite era las 17hs y afortunadamente terminamos justo. Los kenpi de otros países no les alcanzó el tiempo y no pudieron terminar, así que tuvieron que llevarse la tarea a casa.
Después de ordenar el salón donde estuvimos fuimos al piso 14 del Kenchō (el más alto) para una cena de bienvenida con autoridades del Ken e invitados de diversas instituciones. Nos tocó presentarnos y hablar con mucha gente. Ah, y claro, también pudimos comer.
La semana previa estuve hablando por chat con Sayuri, la otra kenpi de Argentina, para definir como íbamos a armar el panel, así que estuvimos reuniendo información y fotos para poner. Y unos días antes del viernes, enviamos a Kinjo-san lo que necesitábamos impreso.
El día empezó a las 13hs con una charla sobre los proximos eventos de la beca, luego consultas sobre correo que recibimos y los alquileres. A las 14:30 aprox empezamos con los paneles. Estos posters serán exhibidos más adelante en el Kenchō.
Cómo los afiches que nos dieron eran un poco más chicos que 1m x 1m que nos habían dicho antes, tuvimos que re adaptar lo que habíamos pensado. Por suerte ya teníamos todo listo y solo fue cuestión de cortar y pegar.
El tiempo límite era las 17hs y afortunadamente terminamos justo. Los kenpi de otros países no les alcanzó el tiempo y no pudieron terminar, así que tuvieron que llevarse la tarea a casa.
Después de ordenar el salón donde estuvimos fuimos al piso 14 del Kenchō (el más alto) para una cena de bienvenida con autoridades del Ken e invitados de diversas instituciones. Nos tocó presentarnos y hablar con mucha gente. Ah, y claro, también pudimos comer.
Terminamos tarde, como a las 20. Aún así, fuimos con los kenpi de Bolivia, Estados Unidos y Canadá a un izakaya.